Esta ruta toma alrededor de 1 hora en coche y tiene unos 50 kilómetros de recorrido. Saliendo de Cáceres hacia el este por la N-521, a nuestra derecha se aprecia la Sierra de la Mosca, y a la izquierda se encuentran los restos de un bosque primitivo, con encinas y ahulagas. En el kilómetro 31 de la N-521 se toma el desvío a Santa Marta de Magasca y dos kilómetros y medio después se toma el desvío a la izquierda. Desde este cruce se puede observar hacia el norte un alto con un grupo de árboles en el que hay numerosos nidos de garcillas bueyeras y cigüeñas blancas (esta es la colonia de “Los Arrogatos”). Se continúa por una de las zonas más hermosas de los Llanos, pudiéndose observar avutardas, sisones, gangas, ortegas y aguiluchos cenizos. Incluso en otoño e invierno se ven avefrías y el paso de grullas hacia los encinares. Al llegar a un nuevo cruce de carreteras, se gira hacia la izquierda, de vuelta a Cáceres, encontrándose de nuevo encinas y abundantes “dientes de perro” (salientes de piedra pizarra).
Un lugar para los amantes de Extremadura